Tener un trabajador de calidad, preparado y bueno en sus labores no siempre está vinculado a un título y así lo han entendido diversas empresas en el mundo. Para muchas firmas fomentar el talento interno y darle la posibilidad de crecer, formarse para sus labores, funciones y desarrollo es vital.
“Las organizaciones ahora entienden que hay mayor número de fuentes de conocimiento y que la aprehensión del mismo indica también el interés, carácter, compromiso y personalidad del potencial empleado, que se responsabiliza por su formación y calidad profesional. Bajo esta visión, el diploma del egresado es importante, pero forma parte de un abanico de evidencias de su calidad y conocimiento profesional”, señaló Igor Frederick Zambrano Ügel, profesor de Mercadeo y Administración de Empresas de la Universidad Central y experto en Gestión y Mercadeo Educativo.
Para Zambrano, el reto en las instituciones educativas es claro: deben adaptarse y cambiar de estrategia y fines, en la medida que la sociedad progresa.
“El camino del futuro es aquel en el que los empleadores como los trabajadores y estudiantes marcharán juntos hacia la nueva sociedad que está en gestación, y las organizaciones educativas deben incorporar las nuevas tecnologías y desarrollar nuevos modelos y procesos educativos que se correspondan a los modelos y procesos que la sociedad les hace”, puntualizó.
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Son muchas las compañías que están adelantando sus procesos de selección sin la exigencia de diplomas académicos para poder aspirar a las vacantes. Entre ellas están las reconocidas Apple, Google, IBM, Starbucks, Chipotle, EY, la editorial Penguin Random House, entre otras.
Las empresas que han hecho este cambio también han transformado progresivamente su visión lineal donde los datos del diploma indicaban el nivel de calidad del egresado.
¿Y qué está pasando en nuestro país?
Ramiro Bado, director en Hays Colombia, comenta que “Nuestros clientes exigen que los perfiles que busquemos para ellos tengan una formación universitaria o técnica. En este nivel no vemos que haya un cambio hacia el futuro. Vemos mayores exigencias en temas como una segunda lengua, por ejemplo, que sigue siendo un asunto sensible para muchas posiciones, y la posibilidad de complementar la formación universitaria con estudios de posgrado, o reforzar habilidades blandas dependiendo del cargo”.
De acuerdo con Hays, en el país hay tendencia hacia la especialización. Según su Guía Salarial de 2018, el 95% de las empresas que participaron en la encuesta aprecian el conocimiento y la experiencia especializada en un candidato y para ellos el requerimiento de un título es fundamental. Pero en otros países el cambio ya se ve.
"Cuando miras a las personas que no van a la escuela y hacen su camino en el mundo, esos son seres humanos excepcionales. Y deberíamos hacer todo lo posible para encontrar a esas personas", dijo al portal Glassdoor, Laszlo Bock, empresario estadounidense, CEO, cofundador de Humu, aplicación de recursos humanos y ex vicepresidente de Recursos Humanos en Google.
Para algunos empleadores las notas o la preparación académica no son siempre importantes y por eso no temen su contratación. Sin embargo, no en todos los cargos funciona. Además, hay que contemplar aspectos del propio mercado laboral y de las políticas internas de la organización para contratación y promoción del talento humano.
“En el área de tecnología existen diversos niveles de profesionalización; no quiere decir que los que son profesionales le van a quitar el puesto de trabajo a los que no lo son o viceversa, pero en ciertas áreas de la industria puede ser que la experiencia o las certificaciones de las personas anulen un diploma para un cargo específico y puedan funcionar bien en la compañía”, indicó Felipe Delgado, director de Michael Page Colombia.
En el proceso de selección, es la empresa la que debe hacer una evaluación de las oportunidades y obstáculos a los que se vaya a enfrentar un trabajador, para así tener en cuenta al momento de su contratación.
“De ahí la importancia de un perfil especializado, con una formación que lo haga destacarse de los demás mostrando experiencia y conocimiento hacia un sector o labor. Tener un título universitario permite dar seguridad al momento de contratar un candidato y para él mismo es una garantía de que su perfil tiene unas bases sólidas que pueden aportar al desarrollo de los objetivos de negocio”, agregó Bado.
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