12 de febrero de 2015
Con un sistema que simula la comprensión de las personas, sus experiencias, conclusiones o inferencias con respecto a su desempeño dentro de una organización, la investigadora Diana María Montoya Quintero quiere resguardar el conocimiento empresarial en el país.
La idea de esta colombiana está enfocada en el análisis de los empleados cuando se vayan de la empresa. Se busca que el proceso se desarrolle por dos profesionales: el experto, que dejará registradas sus experiencias claves en la compañía donde trabaja, y el ingeniero de conocimiento, analista en sistemas inteligentes.
Esto se hace a través del diseño, codificación y análisis de la información con el que se pretende entender qué sabe el experto para representarlo en un modelo que se lleva al computador e involucra el saber humano: conocimiento procedimental, declarativo, cognitivo y transferencia del conocimiento.
En estas fases se hacen preguntas abiertas y cerradas tales como: ¿qué actividades se deben planear para obtener los resultados esperados?, ¿podría usted identificar las causas para superar esta problemática?, ¿cuáles experiencias de las vividas son principales en este caso? También se ofrecen sugerencias para desarrollar soluciones a los problemas planteados.
“Está enfocado a la lógica de los expertos humanos y se busca reunirlo y llevarlo al computador por medio de las técnicas de inteligencia social. Buscamos apoyar a las empresas, no acabar con las vacantes; fortalecer a la organización y sus procesos. El modelo no busca reemplazar al ser humano”, explicó Montoya en entrevista con elempleo.com.
Según la experta, la base son las experiencias del ser humano, “buscamos que se mantenga como se vive el quehacer diario, qué se siente, qué se espera, cuáles son los saberes básicos, lo que podría pasar con las acciones y las actividades, no hay límite, solo hay que ir modificando las versiones”, agregó.
Pasó la prueba en Icontec
Una de las empresas en las que se probó el modelo y con la que se comprobó su eficacia es Icontec, a través de un sistema de auditorías de sistemas de gestión de calidad. Allí se probó cuáles serían los hallazgos de una auditoría bajo la norma técnica colombiana ISO 9001, algo que no se había hecho antes en el país.
Luego de los resultados obtenidos varios expertos del área validan la información, la analizan y dan el visto bueno para ingresarla al sistema, así es consignada en el computador y los interesados en el proceso o en el resultado pueden verlo en el programa, el cual guía y brinda respuestas a medida que se consulta.
“Se están haciendo refinamientos en el modelo, de hecho, una de las características es que hay un espacio abierto a los conceptos y sugerencias que puede dar toda la comunidad que interviene en el proceso, porque igual lo que buscamos es simplemente aprovechar los procesos dentro de la empresa y mantener el conocimiento del capital humano, que es uno de los activos más importantes que tienen las organizaciones”, señaló Montoya.
Fueron tres años los que se demoró la investigadora en la gestión y creación del modelo. Su comercialización se hará con base a la necesidad y dimensión del sistema que soliciten las empresas. Una vez el modelo sea propiedad de cada compañía cualquier persona podrá acceder a él.
“Lo que queremos es que est...
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