Es necesario resaltar en primer lugar que todas las personas tienen la necesidad de descansar para lograr recuperar fuerzas y mantener y potenciar la capacidad de trabajo.
Todo trabajador adquiere el derecho a disfrutar de un descanso remunerado cuya duración será de 15 días hábiles consecutivos, tiempo que se remunerará con el salario ordinario, en este período pueden generarse algunos tipos de interrupciones que afecten al descanso, esto permite al trabajador reanudar su disfrute una vez desaparezca la causa que generó la interrupción, y siempre que ésta tenga una justificación, como sería el caso de una calamidad familiar.
Usted tiene derecho a vacaciones por cada año de servicio y se deberán disfrutar dentro del año inmediatamente siguiente a aquel en que se causaron. La fecha de su disfrute la determinará la solicitud del empleado o la época que determine el patrono, avisando con una anticipación no menor a 15 días hábiles.
Es posible que el trabajador no llegue a disfrutar por diversas causas del descanso, por lo que la ley prevé para tales casos la compensación en dinero, es así cuando por casos especiales de perjuicio para la economía nacional o la industria se considera que el trabajador no debe disfrutar de todo el tiempo de vacaciones y el patrono ha solicitado previamente aviso al Ministerio de Trabajo, o cuando termina el contrato de trabajo y no se ha disfrutado del derecho al descanso que se genera por los años de servicios o proporcionalmente por fracción que exceda de seis meses.
Por acuerdos celebrados entre el trabajador y el patrono es posible acumular períodos de vacaciones, caso en que el trabajador debe disfrutar por lo menos de seis días hábiles de descanso, acumulando de esta forma, nueve días.
Esta acumulación no puede durar más de dos períodos, excepcionalmente cuatro períodos cuando el trabajador tiene el carácter de técnico, de confianza y manejo o cuando es extranjero con familiares que residen en lugar diferente.
*/fuente diario El Tiempo
Comentarios