Carlos Queiroz, extécnico de la Selección Colombia afirmó que ‘le hicieron cajón’ en su salida del cargo

Carlos Queiroz, quien dirigió a la Selección Colombia entre 2019 y 2020, afirmó recientemente que la estrepitosa salida de la ‘Tricolor’ fue un acto orquestado por la Federación Colombiana de Fútbol, encabezado por el vice-presidente de la entidad Álvaro González Alzate, ya que nunca presentó una solicitud de renuncia a su rol como entrenador del equipo nacional.

 

Según declaró Queiroz, la salida del banquillo técnico de la Selección se dio de una manera injusta y su respaldo para argumentar esto, son los documentos de indemnización que la Federación Colombiana le propuso firmar, para garantizar su destitución.

 

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Cabe resaltar que González Alzate también se ha defendido, luego de lo dicho por el portugués y afirma que:

“Nada de lo que dice Queiroz es cierto. Tengo todo muy claro sobre la verdad que conozco y es la misma que ya expresé. Revisen archivos de prensa de la época y verán que después de esos dos primeros partidos de la Eliminatoria contra Uruguay 0-3 y Ecuador 6-1, el señor Queiroz desapareció totalmente del espacio público del fútbol colombiano”.

 

Otro punto importante, que se ha pasado por alto, es que Carlos Queiroz también ha responsabilizado a la Federación Colombiana de haber influido en la decisión del expreparador de arqueros Des McAleena, de terminar con su vida, debido a que su estado de depresión, se vio acelerado por la destitución del cuerpo técnico, sumado a la falta de apoyo por parte de la entidad.

 

Sin duda, esta situación es un claro ejemplo de algo que parece ser más común de lo que se cree dentro de una compañía. Katherine Bohórquez, Consultora Senior de E-Hunters y experta en procesos de selección digitales comenta que:

“Hacerle cajón a alguien, es una muy mala práctica que puede ocurrir en cualquier ámbito, pero que mayormente es utilizada en el plano laboral y consiste en crear un grupo de personas, que sean cómplices entre sí, para hacerle una ‘mala jugada’ a alguien, para afectar su trabajo y hacer que la persona perjudicada pierda su empleo”.

 

En Colombia es recurrente que en una empresa se busque reemplazar a un colaborador por una persona que tenga algún tipo de relación de amistad o familiaridad con los directivos de la misma o vaya por recomendación, algo que es totalmente reprobable, puesto que hacer esto va contra la ética.

 

Ante esto, Katherine también afirma que:

“Estas jugadas denotan falta de ética, empatía, honestidad y respeto, las personas que participan en estas malas prácticas denotan una falta grave en valores y cualquier empresa debería repensar el hecho de aceptarlas, ya que esperar lealtad de este tipo de personas es un imposible”.

 

No obstante, si conoces casos de este tipo o has sido la persona afectada, lo más recomendable es tener a la mano pruebas fidedignas de la calidad de tu trabajo y asesorarse con un profesional en caso de que se deba solicitar indemnización a la empresa involucrada, por los perjuicios generados.

 

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