Actualmente, las empresas se preocupan por ofrecer cada vez más beneficios a sus trabajadores, con el fin de retenerlos y atraer nuevos talentos.
Por esta razón, la implementación de una cultura de desarrollo que responda a las necesidades de los colaboradores es indispensable para mejorar los procesos y fortalecer el negocio.
Elempleo consultó a Alejandro Rodríguez, gerente general de Team Resources, para conocer algunos puntos clave en materia de desarrollo del recurso humano en las compañías.
¿Cuáles son los beneficios de contar con una cultura de desarrollo?
Las organizaciones generan altos niveles de innovación y productividad relacionados con el crecimiento y sostenibilidad del negocio, pues a través del trabajo colaborativo, el acceso a información y experiencias y la toma de riesgos y delegación se producen resultados que incrementan el valor de la compañía en el tiempo.
Algunos estudios mundiales de consultoras como Hays, Bersin y McKinsey demuestran que este tipo de compañías logra tener mejores desempeños de hasta un 15% en rentabilidad, productividad, innovación y crecimiento.
Adicionalmente, estas organizaciones son capaces de atraer, retener y desarrollar el talento necesario para crecer de manera sostenida, lo que les permite construirlo desde adentro y aumentar la velocidad de ejecución, el sentido de compromiso y productividad de los empleados.
Si se tienen en cuenta estos factores y se monetizan está produciéndose valor para los accionistas con esta gestión.
¿Qué elementos deben tenerse en cuenta?
Las culturas de desarrollo toman muchos años en formarse, porque están inmersas en todas las actividades que hace la compañía desde la planeación estratégica, el desarrollo individual y deben aplicarse para todos los niveles de la organización.
Aunque son muchos los elementos, los principales factores son:
- La estrategia de negocios está entrelazada con la de talento. Siempre que se plantean retos estratégicos debe evaluarse la disponibilidad de talento en cantidad y atributos para llevar a cabo la ejecución. Desde estas instancias se planifican las inversiones y las principales estrategias de desarrollo.
- El talento de la organización es evaluado, medido y seguido de manera permanente como cualquier otro tema crítico en la organización, desde el comité directivo. Por eso, estas empresas tienen dentro de sus prácticas la identificación, promoción y desarrollo de altos potenciales, sucesores y expertos técnicos como parte de sus procesos de gestión.
- Los empleados con gente a cargo son evaluados por la gestión del talento y la cultura, como parte de su evaluación de desempeño y carrera. Estas organizaciones invierten tiempo y recursos para formar a los jefes en cómo acompañar el desarrollo de sus empleados.
- Existen estrategias de atracción, desarrollo y retención en los niveles de entrada, funciones técnicas, administrativas, de negocio y alta dirección. Así se aseguran las rutas que movilizan el desarrollo en la compañía.
- Los empleados se involucran en el desarrollo de su carrera, compartiendo con sus jefes y con la organización cómo pueden coincidir sus motivaciones y las necesidades de la empresa, para construir un camino de desarrollo certero.
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