Para la empresa puede generar una ventaja adicional en materia administrativa y salarial, pues se contrarresta el gasto de aportes a pensiones. En promedio se ahorra 12 % del costo total del empleado.
El pensionado, al tener su situación económica resuelta, muestra que trabaja más por gusto, pasión, deseo de sentirse útil y seguir actualizado en el tema técnico que maneja, que por necesidad y eso genera un impacto positivo para el clima organizacional, compromiso con la compañía, resultados y retención de personal, afirma Diana Suárez, consulting manager en Recursos Humanos de Crowe Horwarth, empresa de consultoría en auditoría e impuesto a más de 400 compañías locales y multinacionales.
Diana Suárez señala que la actitud, capacidad y buena gestión son aspectos fundamentales para contratar a este tipo de talento, además del alto nivel de confianza y credibilidad hacia los clientes externos y el personal interno, y van a valorar más la oportunidad y no rotar en el mercado con nuevas ofertas laborales.
Características de contratación
Pueden utilizarse las modalidades tradicionales, siempre y cuando se incluya una cláusula en el contrato en la que se especifique que la persona es pensionada y no debe hacer aportes a pensión.
También depende del tipo de actividad que vaya a desarrollar el colaborador, por ejemplo, si tendrá una responsabilidad directa con la empresa, se recomienda un contrato a término indefinido. Por otro lado, si la labor implica algún grado de autonomía podrían usarse otras como la prestación de servicios, reconoce Santiago Ortiz, consultor de IGA Consultores - Right Management.
Este experto aconseja asesorarse y evaluar los riesgos y ventajas de cada figura contractual, adicional a ello calcular el salario sin los aportes a pensión, pero sí a riesgos profesionales y salud.
Perfiles más comunes
Los pensionados son requeridos para áreas de conocimiento técnico y experiencia específica como asesorías o consultorías, también para cargos de alta confianza y confidencialidad por su capacidad para el manejo de asuntos de seriedad.
Por otra parte, la directiva de Crowe Horwarth asegura que el estado de salud de la persona puede representar una desventaja para la compañía, por eso es primordial evaluar correctamente al empleado antes del ingreso.
No obstante puede apoyarse al jubilado, a través de coaching y reinserción laboral (outplacement), estos dos procesos brindan orientación en términos de auto-eficacia, autoconocimiento y desarrollo personal, y preparan en temas relacionados con técnicas de entrevista, presentación de hojas de vida y nuevas herramientas de red de contactos.
Santiago Ortiz menciona que desde el inicio del proceso de ingreso es fundamental que la organización identifique la manera en que los conocimientos de estas personas van a ser transferidos a otras y el uso de todas las estrategias para una gestión del conocimiento sana y saludable.
Viviana Ceballos
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