En días pasados se realizó en Bogotá el evento "Family Business, Los secretos de la empresa familiar longeva", al que asistieron conferencistas de países como Japón, México y Estados Unidos, que contaron sus estrategias exitosas para garantizar una excelente empresa familiar por muchos años.
La longevidad ha sido el ejemplo a seguir principal que Japón ha aportado al mundo entero casi en cualquier sentido. Por ello, es posible llegar a madurar una empresa de tal manera que se sea consciente de los tiempos y los progresos que debe asumir para enfrentar sus retos día a día.
Actualmente Japón cuenta con más de 3.900 empresas de más de 200 años de vida con gran éxito nacional e internacionalmente.
El empresario Carlos Kasuga Osaka, hijo de japoneses, director de Yakult S.A., fabricante de lácteos fermentados y activista de las relaciones entre Japón y México en este país, habló sobre la importancia que podría aportar la implementación de las estrategias japonesas.
Kasuga afirma que existen algunas estrategias que determinan el éxito en una empresa, que tienen que ver con el respeto a los valores de las personas, tanto fuera como dentro de la empresa, sin importar el rango de la jerarquía en la que se encuentren.
"Lo más importante de una empresa japonesa es no decir "es mi empresa" sino, es "la empresa" por que está formada por el capital, por el personal, los proveedores, por los clientes y la sociedad; si alguno de ellos falla, ya no hay sociedad", cuenta el especialista mexicano.
De otra parte, para que en las empresas japonesas tengan éxito, deben seguir una regla de reinversión durante 20 años que propenda al crecimiento. Las ganancias están sujetas a los honorarios y corresponden a una regla moral de uno a siete, según la escala jerárquica.
Finalmente, este descendiente japonés afirma que lo más importante en una empresa es comprender que los rangos básicos son los de mayor importancia: "la gente más importante es la gente que hace el aseo, por que si faltan tres días, se hace un revoltijo; en cambio, uno como cabeza puede salir del país esos tres días y en la empresa no pasa nada".
Catalina López Fernández
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