Aunque las empresas apuestan a políticas de equidad de género en sus empresas, el mercado laboral todavía representa un gran reto para las profesionales colombianas.
De hecho, el último informe laboral del Dane indicó que para el total nacional, la tasa de desempleo de las mujeres en el último trimestre de 2019 fue 12,6%, una cifra mayor a la de los hombres: 7,2%.
No obstante, afrontar la desigualdad en algunas organizaciones y –en ciertas ocasiones- ambientes laborales machistas, se convierte en una oportunidad para enriquecerse profesionalmente y fortalecer ciertas habilidades.
Encuentra un nuevo trabajo en 2020 en elempleo.com. Regístrate aquí
“Específicamente de un contexto laboral en el que predominan los hombres, las mujeres deben de tener claridad sobre sus responsabilidades, indicadores y metas en donde logren establecer un plan de acción detallado que posteriormente se traduzca en resultados tangibles y demostrables, responsabilizándose de un objetivo común de la organización”, comenta Camila Greiffenstein, Head Services Delivery de DNA Outplacement.
Entre otras competencias se encuentra la “confianza en sí misma, que para cualquier líder esta es crítica y las mujeres, al tener que enfrentarse a este tipo de desafíos de inequidad a nivel corporativo, tienden a desarrollar este aspecto mucho más y prepararse con toda la información necesaria para enfrentar cualquier decisión o situación”, menciona Laura Alba, HR Manager de PageGroup.
Destaca tu hoja de vida y recibe asesoría personalizada con elempleo VIP
Para destacarse por su liderazgo, tanto mujeres como hombres, se deben ganar el respeto y credibilidad de jefes y pares para generar confianza. Así entonces, la opinión del empleado comienza a ser más valorada e impacta positivamente sobre el desempeño de la organización. “No hay que tener personas a cargo para ser líder, ni tampoco estar ocupando una posición determinada para mostrarse como tal”, explica Greiffenstein.
Según Patricia Vargas, gerente de Right Management de ManpowerGroup, “la comunicación asertiva enfocada en las conversaciones de carrera y la transformación cultural de la organización también es clave para abrirse espacio en las empresas y generar relaciones de valor. Una de las razones por las que las mujeres se ven estancadas es por culturas masculinas arraigadas”.
Como líderes, muchas profesionales trabajan más en su inteligencia emocional y aprenden a desarrollar otros aspectos como la motivación y la empatía, dos cualidades importantes cuando se desempeñan en roles que requieren de liderazgo y que buscan generar el mejor desempeño de los demás empleados el trabajo.
“Las situaciones a las que se han visto enfrentadas en donde la inequidad muchas veces se traduce en un número más bajo y en el no ser opcionadas para un cargo o responsabilidad, lo que hace que tengan que ser más recursivas y preparar otros caminos para alcanzar aquello que se necesita”, complementa Alba.
Por: Juan David Castro
Comentarios