Por: Eugenia Jiménez, periodista especializada en Comunicación Empresarial.
La televisión colombiana nos tiene saturados con los ?realities?, que en su inmensa mayoría son programas vanos, con contenidos cargados de enemistades entre los participantes, odios, rencores y rivalidades profesionales; que a criterio de destacados ejecutivos, no conducen a nada bueno.
Pero si miramos en el interior de las empresas vemos que este tipo de relaciones personales son pan diario de cada día.
Manejar un clima organizacional no es fácil, hay que empezar por hacer una selección de personal adecuada donde la gente se caracterice por ser carismática o poseer lo que llamamos inteligencia relacional, que no es otra cosa que la facilidad de hacer amigos o ?caer bien?, a casi todo el mundo.
Esta inteligencia es una cualidad que se desarrolla en personas nobles, sencillas y de mentes fuertes. La parte relacional va muy unida a la percepción que las otras personas tienen de uno mismo.
Bienestar corporativo por encima del beneficio individual
Cuando alguien en la organización refleja envidia, empieza a crearse un clima de ?mala competitividad? donde el trabajo en equipo se hace difícil o peor, pasa a un segundo plano.
Las consecuencias de este accionar son fatales a nivel empresarial, ya que se termina construyendo una ambiente de individualidades, donde las compañías parecen tener tan solo un empleado y en sus resultados esto se empieza a ver reflejado.
De otra parte, la minimización de los compañeros de trabajo provoca dentro de la organización una serie de odios reprimidos y sentimientos encontrados que pueden causar una parálisis parcial o, en algunos casos, total de la empresa.
En la mayoría de los casos ésta situación es causada por personas que se creen irremplazables, sobresalientes en la labor que desempeñan, ven a los demás como inferiores y miran a todo el mundo por debajo del hombro.
Evite que un elemento negativo afecte a toda la compañía
Hay que recordar que los empleados subvalorados empiezan a hacer las cosas de mala gana, lentamente y con reniegos. Para lograr un adecuado clima organizacional es indispensable tener líderes con aptitud humilde, que sepan dar y obedecer órdenes.
Cuando hablamos de poseer una mente fuerte, nos referimos a no dejarnos afectar por lo que piensen los demás. Es difícil encontrar una manzana buena en una canasta de manzanas dañadas, pero no es difícil encontrar una dañada en una canasta de manzanas buenas.
Continúe leyendo: Clima organizacional con inteligencia relacional II
Fuente: Artículo publicado originalmente en la Revista Empresarial y Laboral por Eugenia Jiménez, periodista especializada en Comunicación Empresarial.
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