¿Están los jóvenes preparados para el desafío del mercado laboral que deben enfrentar en el siglo XXI?

En una sociedad cada vez más globalizada y digitalizada, el acceso a las oportunidades laborales se ha vuelto un desafío para muchos jóvenes alrededor del mundo. Hoy, en el Día Mundial de las Habilidades de la Juventud es fundamental reflexionar sobre el panorama laboral que enfrentan las y los jóvenes en Colombia y los efectos de la transición digital sobre el mundo del trabajo.

 

Según cifras oficiales del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), en el último trimestre febrero – abril de 2023, se registró que el 18% de los jóvenes colombianos entre 16 y 28 años no estudian ni trabajan, lo que representa una cifra aún preocupante. Está situación de desempleo y falta de oportunidades laborales afecta el desarrollo y el futuro de los jóvenes, generando desigualdad y exclusión social. (¿Buscas trabajo? Registra tu hoja de vida en elempleo.com) 

 

Desde la perspectiva de la región, se estima que alrededor de 9,2 millones de jóvenes en América Latina están inactivos, es decir, no están trabajando ni buscando empleo. Este fenómeno denominado como "desempleo oculto" es particular, ya que puede indicar desaliento y falta de oportunidades laborales para los jóvenes en la región.

 

Ante este panorama la OIT, en su reciente informe Tendencias Mundiales del Empleo Juvenil 2022 encontró que la economía digital tiene un considerable potencial de creación de empleo para los jóvenes, sólo la cobertura universal de banda ancha para 2030 podría generar 6,4 millones de empleos para ellos y ellas. “La creciente digitalización de la economía y la sociedad está afectando profundamente al mundo del trabajo, y se espera que la tendencia continúe e incluso se acelere en los próximos años.” asegura el informe.

 

Con la nueva realidad digital hay una creciente demanda de nuevos perfiles ocupacionales relacionados con la tecnología. La transformación digital ha creado oportunidades laborales en áreas como la programación, la ciberseguridad y la inteligencia artificial, entre otros; perfiles estos difíciles de abordar por parte de los jóvenes que no poseen las habilidades correspondientes, ni la formación en dichas competencias. (¿Aún no estás registrado en elempleo.com? Acá podrás iniciar la búsqueda de trabajo) 

 

El desafío radica en que un elevado número de jóvenes se encuentra inmerso en un mercado laboral exigente, donde las habilidades y competencias tradicionales ya no son suficientes para encontrar un empleo estable y de calidad. La era digital y la revolución tecnológica han transformado la forma en que trabajamos, generando una alta demanda de habilidades digitales. Según el Informe Regional de Productividad, de la OIT, cuyo enfoque se orienta hacia la transición digital, cambio tecnológico y políticas de desarrollo productivo en América Latina y el Caribe ALC: desafíos y oportunidades¨, existe amplia evidencia internacional que sustenta la importancia de alcanzar trayectorias de crecimiento sostenido de la productividad, para generar ciclos virtuosos de empleo y crecimiento económico, y con ello contribuir a mejorar los ingresos y reducir la pobreza, dado que en los medios de producción se requiere mano de obra calificada en las nuevas tecnologías.

 

Sin embargo, para muchos jóvenes colombianos el acceso a la educación y a la formación en habilidades digitales sigue siendo limitado, sobre todo en los sectores rurales donde la conectividad y el acceso a los medios digitales es bajo.

 

Según el Ministerio de Educación Nacional, en Colombia, más de 400 mil jóvenes han abandonado el sistema educativo, lo que representa un incremento significativo en comparación con los años anteriores, dicho fenómeno incrementa las brechas hacia las competencias digitales. Asimismo, como lo indica en sus informes la Federación Colombiana de la Industria del Software y Tecnologías Informáticas – FEDESOFT -, si bien el sector de las TIC ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años en Colombia, se necesitarán unos 162.000 profesionales para el año 2025 con las habilidades que demanda el mercado actual, es así como la formación de jóvenes en este sector es una de las principales prioridades.

 

En la actualidad, el mundo está experimentando una fascinante y acelerada transición digital que está cambiando la forma en que todos vivimos, trabajamos y nos relacionamos. Esta evolución tecnológica se está manifestando en prácticamente todos los aspectos de nuestra vida diaria, desde la forma en que nos comunicamos y accedemos a la información, hasta cómo realizamos nuestras compras y gestionamos nuestras finanzas. Dado este fenómeno, el informe de Panorama Laboral 2022 de la Oficina Regional de la OIT para América Latina y el Caribe, dice que se requiere avanzar en el cierre de brechas laborales persistentes que permitan potenciar los efectos positivos de la transición digital, la transición demográfica y la transición justa. (¿Estás buscando empleo? Registra tu hoja de vida aquí) 

 

“Es esencial fomentar la colaboración entre diferentes actores, como las entidades de gobierno, las instituciones educativas y formativas, las empresas, para desarrollar programas de formación profesional adaptados a las necesidades del mercado laboral y mitigar las barreras de acceso al trabajo. Además, es necesario crear oportunidades de empleo juvenil, promoviendo el emprendimiento y la innovación, en un marco de formalización, como motores de desarrollo, determinantes para encaminarse en una ruta de generación ingresos sostenible a largo plazo”, afirmó Melva Díaz, funcionaria principal de programas y alianzas de la Oficina de la OIT para los Países Andinos en Colombia.

 

En conclusión, en el Día Mundial de las Habilidades de la Juventud, es crucial reflexionar sobre el panorama laboral de los jóvenes en Colombia y la región, sobre todo frente a la transición digital que vive el mundo. Es momento de actuar y garantizar que los jóvenes tengan acceso a una educación y formación de calidad y oportunidades laborales, brindándoles las herramientas necesarias para afrontar los retos del futuro. Solo a través de una inversión en la juventud y el desarrollo de habilidades podremos construir un futuro próspero y equitativo para todos.

 

 

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