Escrito por: Augusto Buitrago Rioja, gerente de Gestión Humana en Market Team SA
Dentro de las organizaciones se piensa que si no hay oportunidades de ascender (visto como la escala de posiciones jerárquicas) no hay crecimiento profesional y, por ende, las personas tienen que pensar en buscar un lugar para poderlo llevar a cabo.
En algunas empresas que tienen su estructura organizacional un poco más piramidal puede que exista esa opción; sin embargo no es seguro que tenga como política brindar la oportunidad a los colaboradores que tienen el perfil para desempeñar cargos que hayan quedado vacantes.
Si la compañía lo tiene como política ¡maravilloso !, porque cultiva en su gente la posibilidad de desarrollarse y crecer laboral, personal y profesionalmente.
Hoy en día son muchas las organizaciones que por su tamaño reducido presentan una estructura plana. Incluso hay empresas grandes que tienen su estructura plana y las posibilidades de crecimiento de manera jerárquica son mínimas.
Lo importante es que no siempre el crecimiento profesional significa ascender. Hoy por hoy el desarrollo en el puesto de trabajo exige repensar la manera en que se llevan a cabo las actividades, delegar sobre los colaboradores nuevas responsabilidades y empoderar a la gente para que tenga autonomía y poder de decisión.
Del mismo modo, es necesario intercambiar los roles con pares cuando esta medida aplique y la cultura lo permita, conocer de otros procesos y procedimientos y participar en proyectos interesantes que impliquen estudiar, leer o prepararse para una presentación ante la organización.
Todas estas actividades son las que realmente permiten el crecimiento profesional de la gente y el incremento en la memoria intelectual de la organización, al apuntar a la obtención de los resultados esperados.
Obviamente, el crecimiento y el desarrollo va acompañado del ingreso y por eso algunas organizaciones ligan el logro de los objetivos con una variable de compensación; claro, esto no se da en todas las organizaciones, pero si se puede pensar en crear una manera de incentivar el progreso horizontal que los colaboradores demandan.
Con el tiempo tanto empresas como colaboradores están entendiendo que para retener a su gente, y sobre todo a quienes reciben capacitación y entrenamiento, es clave definir una política clara y concreta de desarrollo y crecimiento vertical, con planes de carrera definida y, en algunos casos , de avance horizontal con las mismas características.
Comentarios