Es vital que el candidato tenga los pies sobre la tierra y conozca su valor como profesional, así como el comportamiento del mercado laboral colombiano. De esta manera, podrá saber qué exigir, qué no e identificar una vacante que le ofrezca lo justo como trabajador.
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De manera general, los aspectos que se deben priorizar al encontrar una oferta laboral son “la clase de contrato bajo el cual trabajaría el postulante, el tipo y monto de remuneración ofrecida por la compañía, así como los beneficios y horario de jornada laboral”, puntualiza Ramiro Bado, director en Hays.
Según tus intereses, pregunta y lee bien sobre:
- Contrato laboral (indefinido, fijo o por prestación de servicios)
- Plazos que de permanencia
- Relación laboral con la empresa directamente con la empresa o con una temporal.
Aunque todas las opciones son igual de válidas, lo ideal es “contar con un contrato directo con la empresa, a término indefinido y revisar las condiciones que ofrece la compañía, esto para contrastar lo que se oferta con las expectativas de desarrollo profesional”, dice Alejandro Arévalo, executive manager de DNA Human Capital.
Ojo, antes de comenzar a trabajar debes tener un contrato de trabajo firmado con la empresa, donde se haga claridad sobre la “asignación salarial, fechas de pago, estado de afiliación a seguridad social (en casos que aplique), su rol, expectativas del cargo, el empleador y jefe inmediato”, advierte Daniel Parra, gerente de Permanent Placement de Adecco.
Recuerda que siempre es importante mantener una comunicación directa con la empresa que te está reclutando, si lo haces por medio de terceros, debes exigir –en algún punto- una comunicación directa con la compañía y direcciones del lugar donde irás a desempeñar laborales.
Bado exclama que “hay que tener claro cuál es el perfil de la organización a la cual se está postulando, identificando sus funciones, su reputación y su trayectoria en la industria a la cual pertenece. Incluso, cuando la oferta es informal, esta debería estar acompañada de una posterior comunicación oficial de la compañía”.
Para aceptar un trabajo también es indispensable que los reclutadores o quien te contactó no te haya hecho “aceptar o firmar documentos que puedan afectar tu estabilidad económica, tales como letras en blanco, pagarés o pagos por equipos de trabajo que son responsabilidad del empleador”, recomienda Parra.
Si una oferta laboral te exige que sea capaz de trabajar “bajo presión”, debes saber que esto “no necesariamente puede considerarse como índice de que la vacante sea buena o mala, sin embargo, puede generar una alerta, ya que esto no es una competencia o habilidad que sea excluyente para un cargo. Esto lo que puede indicar es que la cultura de la compañía puede estar fallando en algún punto”, complementa Arévalo.
Por último, pero no menos importante, están los beneficios que la empresa le pueda ofrecer.
Hoy en día muchos empleados buscan:
- Flexibilidad laboral
- Días de vacaciones adicionales a lo establecido por la ley
- Teletrabajo
- Medicina prepagrada
Juan David Castro Rodríguez
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