Los problemas de salud mental están en franco aumento entre las personas en edad laboral. A esa conclusión arribó la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en un informe realizado luego de un estudio entre trabajadores de Alemania, los Estados Unidos, Finlandia, Polonia y el Reino Unido.
La investigación indica que uno de cada diez trabajadores sufre depresión, ansiedad, stress o cansancio, que en algunos casos llevan al desempleo y a la hospitalización.
De acuerdo con el informe, en los países de la Unión Europea, entre el 3 y el 4 por ciento del producto bruto interno (PBI) se gasta en problemas de salud mental. "En los Estados Unidos, el gasto nacional asociado con el tratamiento de la depresión se sitúa entre 30.000 y 44.000 millones de dólares al año.
La depresión clínica es una de las enfermedades más comunes entre los norteamericanos. "Llega a afectar, cada año, a una décima parte de los adultos en edad de trabajar, con el resultado de una pérdida de aproximadamente 200 millones de días de trabajo anuales", asegura la OIT.
En Finlandia, más del 50 por ciento de los trabajadores sufre algún tipo de síntomas relacionados con el stress, tales como ansiedad, sentimientos depresivos, dolor físico, exclusión social y trastornos del sueño; y el 7 por ciento padece un cansancio severo.
"En Alemania, los trastornos depresivos son responsables de casi el 7 por ciento de las jubilaciones prematuras y la incapacidad laboral por motivos relacionados con la depresión se prolonga dos veces y media más que la incapacidad por otras enfermedades", indica la investigación.
Casi tres de cada diez empleados británicos padecen, anualmente, problemas de salud mental. "La depresión es un problema tan extendido que, uno de cada 20 británicos en edad de trabajar está padeciendo una depresión importante." Por último, las estadísticas de sanidad pública en Polonia indican la existencia de un número creciente de personas que están recibiendo asistencia sanitaria mental.
Qué hacen las empresas
Ante la preocupante situación del aumento de los problemas mentales, varias compañías han decidido hacerle frente al problema.
· Estados Unidos: muchos empleadores son conscientes de la relación entre salud y productividad y, por eso, desarrollan programas para integrar favorablemente el trabajo, la familia y la vida.
· Finlandia: el concepto finlandés de capacidad laboral no se refiere sólo a promover la salud física de los empleados, sino que tiene que ver también con su salud mental en organizaciones en las que el trabajo sea saludable.
· Alemania: desde hace varios años se desarrollan con éxito programas para reducir el stress que incluyen procedimientos de relajación, interpretación de roles y formación de comportamientos para aumentar la confianza de las personas en sí mismas y mejorar sus capacidades.
· Reino Unido: algunas empresas diseñaron políticas de salud mental para el lugar de trabajo.
Fuente OIT y Lanacion.com
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