Las recomendaciones en el campo laboral tienen alto grado de sensibilidad. Debes tener en cuenta -si eres quien va a sugerir a alguien para un puesto- que esa persona no te vaya a hacer quedar mal. No obstante, si tú eres el recomendado, piensa muy bien en la reputación que tiene el funcionario que te va a postular, pues puede que tu contratación dependa de eso.
María Patricia Guzmán Zárate, directora ejecutiva de Cotelco Bogotá, resalta lo que todos sabemos: nadie recomienda a quien ha defraudado la confianza o no ha cumplido con compromisos anteriores. Pero si el recomendado es contratado, deberá aprovechar la oportunidad y demostrar que quien lo sugirió no se equivocó.
Sin embargo, Guzmán va más allá y asegura que es posible que una ‘recomendación’, que más bien sonaría a ‘intervención’, afecte negativamente el proceso del candidato.
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¿Es posible que una persona que va muy bien en su proceso de selección pierda el puesto por una recomendación final? La respuesta es sí. Pero, ¿por qué? Existen varias razones. Por ejemplo, que la persona encargada de hacer la recomendación no sea del agrado de quien decide si se contrata o no, o porque su reputación dentro de la empresa no es favorable.
Otra causa puede ser porque el candidato tuvo un proceso de selección tan limpio que no necesitaba ser sugerido por alguien y que por ese hecho el seleccionador sintió que esa ‘ayuda’ de más estropeó el camino del aspirante.
Diana Paola Cuevas, supervisora de SC Johnson, comenta que “es bueno recomendar a alguien en el momento que tengamos la seguridad de que es una persona responsable y comercial en el cargo a desempeñar. No es bueno recomendar a alguien irresponsable, deshonesto y no cumplidor de deberes laborales y personales”.
Cuevas agrega que es mejor recomendar antes de iniciar el proceso. Pero sugiere que lo ideal sería no postular a nadie, ya que cada una de las personas a presentarse en un trabajo debe demostrar con habilidad y experiencia lo que la empresa está buscando y debe cumplir 100% el perfil requerido.
Foto: iStock
Si tú estás pensando en pedir una recomendación o ayuda para conseguir un empleo, analiza si la persona a la que acudes de verdad conoce tu trabajo y si estaría dispuesta a ayudarte sin sentirse presionada. Las recomendaciones laborales justificadas en una amistad no son la mejor decisión.
De igual manera, sé sensato contigo mismo y no permitas que te sugieran para cargos o roles en los cuales no tienes las capacidades, aptitudes, ni el conocimiento para afrontarlos y ejercerlos de la mejor manera.
Finalmente, Cecilia García, gerente de Franz Viegener, afirma que la persona recomendada, además de realizar muy bien su trabajo, debe cuidar demasiado su comportamiento para no hacer quedar mal a quien puso ‘las manos al fuego’ por ella.
Cuando tú consigues un empleo, debes demostar responsabilidad y agilidad en el cargo, no importa si llegas a él con o sin recomendación. Tu trabajo hablará por ti.
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