El cálculo es conservador, pero se basa en los resultados obtenidos por la industria de confecciones que realiza maquila para exportar a Estados Unidos y que actualmente emplea a unas 250.000 personas en forma directa.
La expectativa de aumento en el empleo a partir del Atpa se revivió tras conocerse la decisión de dos senadores norteamericanos, Bob Graham -republicano- y Mike DeWine -demócrata- de presentar un proyecto de ley para que el Congreso de Estados Unidos apruebe la extensión y ampliación de beneficios arancelarios para los países andinos.
Se trata de una de las iniciativas más importantes para Colombia en materia comercial ya que permitirá que se conserven los beneficios para 6.000 productos que actualmente entran al mercado de Estados Unidos sin pagar arancel y que incluirá otros productos más.
Al exponer los motivos para presentar este proyecto de ley, el senador Graham sostuvo que la idea es apoyar comercialmente al gobierno colombiano en su programa para erradicar el narcotráfico.
Y como estas acciones traerán consigo la eliminación de por lo menos 500.000 empleos que genera actualmente el narcotráfico, el apoyo resultará fundamental en el tema comercial, consideran los senadores norteamericanos.
La iniciativa es una respuesta a la reciente visita del presidente Andrés Pastrana a su homólogo George W. Bush, pues el mandatario colombiano insistió en que el país requiere ahora es apoyo comercial para hacer efectivos los resultados del Plan Colombia.
Para los funcionarios de la embajada de Colombia en Estados Unidos, la radicación del proyecto, bajo en número S-525 es una respuesta clara a esta petición y también el resultado de la diplomacia desplegada por el gobierno nacional.
Aunque el proyecto de ley apenas comienza su curso legislativo, tras ser radicado en una comisión de comercio, se estima que su tránsito no tendrá mayores obstáculos pues es apoyado por demócratas y republicanos.
El proyecto busca ampliar por cinco años más la vigencia del Atpa, el acuerdo de preferencias arancelarias andinas que vence el próximo 4 de diciembre, y adicionalmente ampliar a otros productos como textiles, confecciones y atún.
Pero además del interés de apoyar la lucha contra el narcotráfico que libra Colombia, los senadores norteamericanos también señalaron que el apoyo a la producción de confecciones en América Latina resulta estratégico para el continente.
Según el senador Bob Graham, si no se fortalece la industria norteamericana, la andina y la centroamericana de confecciones, él ingreso de los productos de China podrían borrar del mapa unos 75.000 empleos en Estados Unidos.
Fuente portafolio.com.co
Comentarios